El intendente de la ciudad de General Pico, Juan José Rainone, visitó en la mañana de este miércoles el barrio de Villa Borgna -conocido como Trebolares- con el objetivo de poner en funcionamiento un sistema de tratamiento de agua mediante ósmosis inversa.

El mandatario local se mostró muy satisfecho al afirmar que “con ésta obra dejamos realizadas y en marcha todas las obras del programa Presupuesto Participativo con ejecución en el año 2018”.

En referencia a la planta, Rainone expresó “es una obra muy esperada por los vecinos, porque implica la mejora de la calidad de vida de quienes viven aquí. Era una necesidad y un viejo anhelo de la sociedad por la importancia que tiene tener buena calidad de agua”.

En el marco de la ejecución de las obras del programa Presupuesto Participativo, los vecinos de Trebolares decidieron instalar un sistema de tratamiento de agua mediante ósmosis inversa, solicitud que fue respondida por la Municipalidad de General Pico.

Respecto al mismo, el ingeniero director de Infraestructura y Obras Municipales Sebastián Adamo, explicó que “el sistema consiste en una perforación para captación de agua cruda y una planta de ósmosis inversa que permite tratar el agua dejándola con una calidad apta para el consumo humano”.

Asimismo, añadió que “es un sistema de desalinización de agua que trabaja ejerciendo una cierta presión con una bomba adecuada sobre una membrana. La misma está compuesta por un conjunto de tanques, bombas, filtros, membranas y sensores que permiten el correcto funcionamiento del sistema”.

“Además, en su última etapa, el agua es tratada para un sistema de control bacteriológico a partir de dosificación de un agente oxidante de gran capacidad de desinfección, gran poder residual y que tiene la ventaja de no generar gustos en el agua que trata. La planta instalada tiene una capacidad de producción de 200 litros por hora”, continuó Adamo.

Por último, el funcionario expresó que “de esta manera el agua es tratada y desinfectada, quedando a disposición de los vecinos de Villa Borgna a través de una canilla que fue colocada en la vereda de la comisaría local con el fin de que la gente pueda llevar sus bidones y llenarlos sin costo alguno y durante las 24 horas del día”.