En medio de las versiones sobre un posible ajuste drástico en el INTA, el gobernador de La Pampa, Sergio Ziliotto, salió a marcar la cancha. Lo hizo tras un encuentro con autoridades y referentes gremiales del Instituto Nacional de Tecnología Agropecuaria, donde advirtió que el Gobierno nacional avanza con un plan de “desfinanciamiento, vaciamiento y desprestigio” del organismo.
“Desguazar el INTA es frenar la innovación tecnológica aplicada al sector agropecuario y agroalimentario. Es menospreciar a un recurso humano altamente capacitado y no conocer el verdadero potencial productivo del país”, publicó Ziliotto en su cuenta de X (ex Twitter) tras el encuentro.
El mandatario estuvo acompañado por la ministra de la Producción, Fernanda González, y recibió al director regional del INTA, Jorge Reynals, junto al coordinador de Extensión, Juan Lux, la coordinadora de Investigación, Andrea Figueruelo, y el secretario general de APINTA, Roberto Maldonado.
El INTA, en la mira de la motosierra
La preocupación no es nueva, pero en las últimas horas creció el alerta dentro del organismo tras la denuncia de los trabajadores: aseguran que Javier Milei y el ministro de Desregulación, Federico Sturzenegger, avanzan con un decreto que implicaría el cierre de áreas completas y el despido de cientos de empleados.
La iniciativa generó un fuerte rechazo interno, pero también puso en alerta a los productores agropecuarios, tradicionalmente aliados del Gobierno nacional. La Comisión de Enlace ya manifestó su “preocupación” por los efectos que podría tener el ajuste sobre el funcionamiento del organismo.
El decreto, según trascendidos, permitiría al Ejecutivo intervenir directamente el INTA para reorganizarlo, eliminar programas clave y avanzar con la venta de patrimonio público. Una movida que tensiona el vínculo entre el campo y la Casa Rosada.
ATE en estado de alerta
La situación encendió las alarmas también en los gremios. ATE declaró el “estado de alerta y movilización permanente” frente a lo que consideran “una amenaza directa de despidos masivos y el cierre de centros de referencia y áreas de extensión”.
Desde APINTA, el gremio específico de los trabajadores del INTA, advirtieron que la pérdida de estructura significaría romper una red federal de innovación y asistencia técnica que impacta directamente en la productividad del agro y las economías regionales.
“Siempre contarán con nosotros”
Ziliotto expresó su respaldo al INTA como herramienta estratégica para el desarrollo pampeano y nacional. “Así como siempre trabajamos en conjunto para mejorar la producción, ahora pueden contar con nosotros para defender su historia y, sobre todo, el futuro del desarrollo federal de la Argentina”, aseguró.