A menos de una semana del vencimiento del plazo dispuesto por el Servicio Nacional de Sanidad y Calidad Agroalimentaria (Senasa), el Gobierno nacional resolvió extender por 60 días la suspensión del ingreso de carne con hueso al sur del río Colorado desde zonas con vacunación contra la fiebre aftosa.
La medida, oficializada este martes mediante la Resolución 419/2025 publicada en el Boletín Oficial, prorroga la disposición anterior —la Resolución 186/2025— que había establecido una pausa de 90 días tras el intento del Ejecutivo de flexibilizar las barreras sanitarias que rigen en la Patagonia.
Según indicaron fuentes oficiales, la decisión apunta a ganar tiempo para recibir respuestas formales de países como Chile y miembros de la Unión Europea, a quienes se les consultó si la modificación normativa podría acarrear consecuencias comerciales o sanitarias.
Desde hace años, La Pampa cuestiona la existencia de esta barrera, que considera más comercial que sanitaria. El reclamo se centra en que la medida encarece artificialmente el precio de la carne en la región patagónica, funcionando —según los críticos— como una especie de aduana interna.
En marzo pasado, el Senasa había dado un giro al reconocer que el riesgo de contagio de aftosa a través de carne con hueso era “ínfimo” y publicó la Resolución 180/2025, que habilitaba el ingreso de carne con y sin hueso, productos cárnicos y material genético desde zonas del país donde se vacuna contra la enfermedad. Pero la fuerte oposición en el sur del país forzó una rápida marcha atrás: en menos de 24 horas, se anunció la suspensión por tres meses de su implementación.
Ahora, con el nuevo vencimiento previsto para este lunes 16, el Gobierno optó por prorrogar la medida mientras aguarda respuestas clave del exterior. “El objetivo es esperar las respuestas de los países con los que se hicieron consultas formales”, señalaron fuentes oficiales.
El secretario de Agricultura, Sergio Iraeta, explicó que las consultas surgieron a pedido de productores patagónicos preocupados por posibles conflictos comerciales. “Consultamos si la decisión podía representar algún inconveniente con Chile, con la Unión Europea o con el traslado de animales desde Tierra del Fuego a Santa Cruz”, afirmó.
En lo que respecta al tránsito de hacienda desde Tierra del Fuego —que debe pasar por territorio chileno para llegar a Santa Cruz—, trascendió que ya habría una respuesta positiva. “No habría problema”, indicaron desde el entorno oficial.
Sin embargo, para los mercados internacionales, especialmente los vinculados a la exportación de carne ovina patagónica, todavía se espera una confirmación sobre si la flexibilización del estatus sanitario podría derivar en restricciones comerciales o nuevas exigencias regulatorias.