Las negociaciones paritarias entre el Gobierno de La Pampa y los gremios estatales volvieron a tensarse este martes, luego de que la Provincia pusiera sobre la mesa una oferta salarial atada a la inflación. La propuesta oficial incluyó un incremento del 2,8% en mayo, en línea con el Índice de Precios al Consumidor (IPC), y la aplicación de una cláusula gatillo para junio.
La oferta fue rechazada por los sindicatos, que reclaman una mejora sustancial. Desde la Unión de Trabajadores de la Educación de La Pampa (Utelpa), por ejemplo, pidieron que se desacople el cálculo del aumento de los datos del Indec, a los que calificaron de “cuestionables”, y exigieron una suba no menor al 12%.
Ante la falta de acuerdo, las partes pasaron a un cuarto intermedio y volverán a verse las caras este miércoles 21. Mientras tanto, la administración provincial hace números para evaluar una posible mejora en la oferta que permita cerrar la discusión.
Las negociaciones se dividieron en dos mesas: una específica para el sector docente, que se desarrolló en la sede de la Subsecretaría de Coordinación de Educación; y otra para el resto de los gremios estatales, que tuvo lugar en la Sala Mechi Mario de la Casa de Gobierno.
La cláusula gatillo es un mecanismo que actualiza los sueldos según la inflación, pero los sindicatos advierten que ese esquema, sin una mejora real del salario, no alcanza a compensar la pérdida del poder adquisitivo acumulado en los últimos meses.
La discusión sigue abierta, pero el clima ya está caldeado. Todo indica que la pulseada entre el Gobierno pampeano y los trabajadores estatales continuará al menos unos días más.